martes, 22 de marzo de 2011

Capítulo 4


Con mucha vergüenza, Marienela ha salido de la casa y gira la esquina y se topa con otro chico que iba muy deprisa y los dos caen al suelo. Él uno encima del otro.
--epa –dice Félix.
Félix se levanta y ayuda a la chica que ha caído al suelo. Nunca Marienela había tenido un hombre tan cerca, nunca la había tocado y siente un escalofrío que la gusta y le asusta.
--¿estás bien? –le pregunta el guapo chico con dulzura y una amplia sonrisa.
A ella le gusta pero también le asusta y huye corriendo.
Félix la mira divertido:
--que chica esta. ¿de donde vendrá? ¿qué hará por aquí?
Sonriente entra en la casa. Se oyen fuertes jadeos de placer y en seguida vuelve a salir.
--¡como se están poniendo este Omar. ¿y quien será ella? Parece que estén matando una pareja de cerdos. ¡que pasión¡¡
Juan llega en ese momento con el desayuno.
--ey, Félix. ¿qué haces aquí fuera? Aún no salió Omar de la ducha?.
--pues como que no –dice Félix sonriente y moviendo negativamente la cabeza.
Juan hace intención de entrar mientras dice:
--pues a ese lo espabilo yo que Rubén debe estar apunto de llegar y no quiero que piense que somos unos aficionados. Tú mientras llama a Adri a ver en cama de qué guapo se quedó dormido.
Félix se pone delante de la puerta para que su amigo no pase.
--¿pero que te pasa?
--es que Omar está en la ducha pero no sólo, está con una chica.
Juan se le ríe:
--venga, venga. que más le gustaría a él. si no debe hacer ni 5 minutos que lo he dejado en la ducha, solo.
Félix se aparta:
--pues pasa y compruébalo.
No tiene que pasar ya que los jadeos se oyen nada más acercarse a la puerta.
--pero que cara tiene el tío, cuando uno se descuida. Y eso que le dije que quería que Rubén se llevara una buena impresión. Imagina si llega ahora. ¿Qué le decimos?
Félix sonríe:
--pues lo siento. porque tu nuevo amigo justo está llegando.
--lo que faltaba. Ahora que le digo. Va a pensar que somos unos informales.
--bueno, él es joven y tiene novia. entenderá de estas cosas. Lo comprenderá.
--él es un profesional. Tuvo su grupo, su disco, sus conciertos.
--pero muy bien no le fue.
--pero tiene experiencia. Es lo que necesitamos y si llega para el ensayo y se encuentra con ese espectáculo va a creer que no nos tomamos en serio esto.
--¿y que hacemos? Pues ni modo que entremos a interrumpir a Omar. Eso no se vale, ya que uno de nosotros tiene suerte.
--habla por ti no por mi.
Félix mira fijamente a su amigo y piensa:
--pues sí porque yo hasta ahora sólo me lo he hecho con tu tía y ahora que sé casó, pues me quedo a dos velas.
--¿en que piensas? –Juan.
--no en nada –dice Félix nervioso.
--pues tenemos que pensar que hacer para que Rubén no descubra este bochornoso espectáculo.
--pues que sea rápido.
Rubén llega hasta ellos y los dos amigos lo miran nervioso:
--¿os pasa algo chicos? –Rubén.
Félix y Juan se miran forzando una sonrisa. Mientras, ajeno a todos, Ana y Omar están desnudos en la ducha copulando como bestias en celo. Adri llega en ese momento. Sus andares son de macarra. Se pone muy contento a ver a Rubén. Mira derretido el trasero de Rubén. Le encanta.
--¡que culo tiene el tío¡ --piensa.
Adri no puede ocultar la fuerte atracción que siente hacia Rubén. Se pega a él. Rubén se siente algo incómodo pero no dice nada.



Por otro lado, Luís cuelga el móvil y Elisa se acerca a abrazarlo.
--ya era hora. no creí que te tardaras tanto. se va a enfriar el desayuno. espero que no te vuelvan a llamar.
--perdón, mi amor, pero es que es tu empresa ha estado mucho tiempo abandonada.
--eso no es cierto, aunque mi hermano tiene sus propios negocios estaba al tanto de que todo fuera bien.
--pues no lo hacía muy bien y es que la Helmut Music siempre fue una gran empresa pero tú me perdonaras, tu padre por su edad ya no se podía ocupar y tú hermano tiene otros intereses con eso de su empresa agrícola. Tu empresa necesita alguien como yo, por eso siempre quise que tu padre me la vendiera, era una pena que perdiera su prestigio.
--bueno pero ahora estás tú. Seguro que la podrás levantar en seguida.
--eso no lo dudes pero para eso tengo que trabajar duro, no nos van a regalar nada. Tenemos que lanzar nuevos grupos. El de tu sobrino es muy idea.
--sí pero ¿no crees que a la gente le parecerá que es como un favoritismo y no lo tomará en serio?
--esos muchachos valen pero no te preocupes, a tu sobrino se le ha ocurrido una brillante idea. Su grupo se va a catapultar a la fama y nosotros con ellos, vamos a ganar mucho dinero. Voy a triplicar los ingresos de la empresa..
Más impresionada por la ilusión de las palabras de su marido que por el hecho de tener más dinero, Elisa no deja de besarlo y abrazarlo. Luís sigue hablando de sus planes
--Tengo que trabajar duro para que no te arrepientas de haberme hecho presidente de tu empresa.
--no es mi empresa, es nuestra empresa que para algo nos casamos en bienes gananciales. --Elisa.
Al guapísimo hombre le brillan los ojos. Sonríe como para disimular su interés:
--bueno, eso es un puro trámite, ya sabes que a mi lo que más me interesa eres tú.
Aunque no lo acaba de creer del todo, a Elisa le encanta escuchar a su marido diciéndole cosas bonitas:
--¿de veras me quieres?
Con una perfecta dulzura fingida él le dice:
--claro que sí ¿es que lo dudas? No te lo he demostrado ya? Nos hemos casado y eso es hasta que la muerte nos separe.
Luís sonríe y la besa para que se quede contenta.
--para que no te quejes, vamos a la piscina. estaremos toda la mañana juntos antes de ponerme a trabajar.
--¿cómo que a trabajar?
--ya te dije, tengo muchas cosas pendientes, muchos planes. tengo que hacer muchas llamadas.
--¿No puede esperar?
--no, cariño. son urgentes.
con algo de fastidio Elisa dice:
--bueno, pero la luna de miel es sin trabajo. sólo tú y yo. Por cierto. aún no me has dicho donde me vas a llevar.
Luís fuerza una sonrisa, trata de encontrar las palabras justas para decirle a su esposa lo que le tiene que decir sin que esta se enfade.

*Luís se finge enamorado con su esposa pero sólo le interesan sus negocios.

Intentando mostrarse calmado, Juan dice a su nuevo amigo:
--nos permites un momento?
Adri se queda encantado al lado de Rubén. Sus miradas cada vez más calientes y Rubén cada vez más nervioso. Juan se lleva a Félix y se aparta un momento:
--yo me lo voy a llevar y yo lo entretendré tú ves y dile a Omar que se apresure --susurra.
--¿cómo voy a hacer eso?
--bueno... pues te quedas aquí con la oreja pegada y cuando ya no haya peligro entras para que yo sepa que todo pasó. A ver que le invento a éste.
--eso me parece mejor.
Rubén sorprendido:
--¿os pasa algo? Es que estoy loco por ensayar. ¿es que aún no estáis listos?
Juan le pasa la bandeja con el desayuno a su amigo y le dice:
--sí, sí. lo que pasa es que antes te quería comentar unas cosillas, sobre una idea que tuve.
--si bueno. entramos y me comentas.
--no, mejor primero te lo comento a ti y luego a los demás.
Rubén, sorprendido mira hacia Félix que está muy nervioso pero fuerza una sonrisa para que parezca que todo es normal. Lo mismo intenta Juan que abraza por los hombros a su amigo y se van juntos.
-¡hey esperar tíos¡ --dice Adri.
Adri va detrás de los culos de Rubén y Juan. La verdad es que los dos tienen buen trasero aunque el de Juan es pequeñito y Adri está encantado de estar dónde está. Sus ojos son puro libido.
Más tranquilo, Félix abre un poco la puerta y le ensordecen los fuertes jadeos:
--¡¡como se están poniendo¡¡ --dice con cierta envidia.

*Los chicos protegen a Omar para que Rubén no descubra que se acuesta con su novia.

Solo en su casa, Juan padre mira alguna de las fotos de la boda. Son las que los invitados no compraron. Sonríe con ternura al ver las de Yolanda. En una está la joven sola y en otra con su hijo. Sonríe con ternura. Siente una felicidad que no entiende al pensar en esa joven. Está seguro que es porque esa joven le encanta para su hijo. Pone esas dos fotos en un sobre y dice:
--ya tengo excusa para ir a verla sin que se vea raro.
El hombre sale de la casa y se acerca a su chofer que está lavando el coche:
--tú sabes donde vive la novia de mi hijo?
--sí, quiere que le lleve alguna cosa? –dice mirando el sobre que éste tiene en la mano.
--no, es algo importante y se lo quiero llevar yo personalmente. quiero que me digas donde vive.
El corazón del hombre late con fuerza y con ilusión, con la ilusión de un adolescente, al pensar que volverá a ver a Yolanda.
La joven vive en un barrio humilde algo que no le detiene. Al contrario, así respecta aún más a la chica y le gusta que su hijo se haya fijado en ella sin importarle su clase social.
--lástima que se lleven tantos años. no sé si sus padres deben aprovechar que su niña salga con un joven 11 años mayor que ella, no sé. No creo que piensen que esa relación pueda funcionar. Hay demasiada distancia, mi hijo ya tiene edad de sentar la cabeza y en cambio ella aún es una niña. Tengo que ir con mucho cuidado.
Aunque tiene muchas ganas de verla ahora que está delante de la puerta no sabe si es buena idea:
--¿y si sus padres no saben que fue de boda?¿y si la meto en problemas? Mejor me voy.
Aunque con una tristeza que no entiende, el hombre decide volver al coche. Y la puerta se abre de repente.

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