Capitulo 21

Omar entra en el baño. Félix está en el urinario haciendo pis.
--¿¿tú eres tonto o qué te pasa?¿qué haces?
Félix se hace el que no sabe.
--tenía que hacer pis.
Omar le da un golpe en la nuca y a Félix casi se le desvía el tiro.
--¡oye, que me voy a mojar¡
Omar se la saca, comienza a hacer pis a su lado.
--¿¿es que a ti la pinga sólo te sirve para mear?
Félix se ruboriza:
--Ya sabes que soy muy tímido.
Con una mano Omar se la aguanta y con la que está al lado de Félix la va moviendo y a veces le golpea:
--¡pero si tú no tienes qué hacer nada¡ ¡Esa guarra lo iba a hacer todo, ella encantada te convierte en su esclavo sexual¡ ¡¡es el sueño de cualquier macho¡
--Mejor te la tiras tú.
Omar mira a Félix boquiabierto. No puede entenderlo. Para Omar el sexo lo es todo, junto a la música es su gran pasión y no puede entender que Félix rechace a una chica que se le está ofreciendo en bandeja.

Mientras, Juan ha llevado a Silvana hasta la casa en la que ensayan. Ella quiere acostarse con él pero Juan sabe que aún no puede.
--¿tomamos algo?
Ella hace que sí en la cabeza.
--¿No hay nadie? –dice nerviosa.
Juan se finge amoroso con ella.
--No, estamos solos.
Ella está nerviosa, piensa en Omar, en que le gustaría que llegara en ese momento y sintiera celos.





Félix y Omar mean juntos.
--¿y a ti que te pasan? Con la golfa de Elisa no eras tan tonto… ¿es que te gustaba?
--no, no es eso pero había confianza…
--Pero yo voy a estar contigo, ¿es que tienes miedo de no dar la talla? Esa zorra está tan cachonda que no le va a importar. Lo que quiere es que se la metas de una vez.
Félix habla con timidez porque sabe que su amigo no lo va a entender.
--sólo que no me apetece.
Omar no da crédito a lo que está oyendo. Hacía rato que ninguno de los dos hacía pis y tienen mucho que descargar. Están un buen rato. Omar tiene la verga agarrada con la mano y con la otra golpea a Félix:
--¿¿¡Qué dices imbécil, tienes una tía deseosa de abrírsete de piernas… ¿¿le vas a decir que no?
Félix hace que sí con la cabeza.
--¿¡no te piensas acostar con ella? –Omar escandalizado.
Félix de nuevo mueve la cabeza haciendo que no. Omar le da un nuevo golpe detrás del cuello.
--¡tú eres tonto¡
Félix se le queja:
--¡no tengo porque acostarme con ella si no me apetece¡
Y eso es precisamente Omar, que siempre está apunto, lo que no entiende.
--A ver si va a tener razón ella y te gusto yo.
--Sabes que no es cierto.
Omar se muestra tranquilo, tiene claro que Félix no es gay pero no entiende porque rechaza a la chica. Félix se pone nervioso, no sabe cómo explicarle las cosas, lo que siente, sabe que Omar no lo va a entender, que se va a reír de él. Igual Omar no le da tiempo. Félix se la sacude, Omar también, mientras Félix se sube la cremallera, Omar lo agarra y lo estira del brazo. Contundente le exige:
--¡ahora vamos con Sol y te las vas a tirar aunque sea para que yo me la tire también¡
Félix resopla.

Ana, por su lado, se ha acostado con Rubén. Ella se levanta, él sigue en la cama desnudo. Feliz.
--no te vas, verdad? ¿te quedas esta noche, verdad?
A Ana le gustaría celebrar ese triunfo de los chicos con cada uno de ellos pero sin tener que renunciar a Rubén.
--No, voy a fumar a la ventana –dice ella.
Eso es algo que le sorprende a él.
--si siempre fumas en la cama.
--pero a ti no te gusta.
Rubén suspira enamorado. Piensa que su novia lo ama mucho, que piensa en él. Ana da la espaldas a Rubén. Fuma. Mira su móvil por si tiene una llamada. Va la baño. Trata de localizar a Omar y Juan pero ninguno la contesta. Si le hubieran tomado la llamada pues ya habría encontrado alguna excusa para su novio pero como no ha sido así vuelve a la cama. Está de mal humor. Pasa por el lado de las tres rosas de Rubén le compró y que ya han perdido su belleza.
--¡tira ya esa porquería¡
Rubén se muestra amoroso con ella.
--¿repetimos?
--Si claro pero aún no te has recuperado.
Rubén está muy contenta. A ella le gusta Rubén pero no tiene bastante con él, le gustaría acostarse con todos los niceboys al completo y no descarta con más de uno a la vez. Piensa en eso mientras Rubén le dedica caricias y palabras de amor.

Por otro lado, Juan está tumbado en el sofá. Silvana ha logrado despertar a Juancito y se arrodilla ante él y se la empieza a chupar.
--¿no prefieres que vayamos a la habitación? Estaremos más cómodos –dice Juan.
Silvana no dice nada porque tiene la boca llena y saborea bien la gorda verga de Juan que está bien rica. Silvana está contenta con Juan, le gusta estar con él, se lo pasa bien teniendo sexo pero le da rabia la manera en la que lo trató Omar y quiere que él los vea. Tiene la esperanza que se ponga celoso. A Juan también le apetece que Omar los vea, es lo que necesita para frenar una posible salida del armario a la fuerza. Le hace sentir más macho. Cierra los ojos y piensa en momentos en los que ha sentido verdadero placer, en alguno de los mejores guapos que han pasado por su cama. En ese momento es cuando Omar entra en la casa. Omar no la mira con celos sino con cara de depravado, de estar pensando que es una golfa y a Silvana le duele.
--perdón, tío. No te quería interrumpir.
Juan no abre los ojos, si piensa en chicos su placer es más real. Hace un gesto de no pasa nada con el pulgar pero va acariciando la cabeza de la chica para evitar que se levante y frene.
--no os molestamos –dice Omar.
Silvana no espera que Omar llegara con una chica y con Félix.
--ups, perdón –dice Félix.
En esos momentos, Silvana sí quisiera que la tierra la tragara. Como ve que está pasando un mal rato, Sol le dice:
--Tranquila, nosotros venimos a lo mismo –Sol.
--¡yo no¡ --Félix.
Felix va siendo golpeando por Omar.
--tú eres tonto…
Omar mira a Sol con cara de depravado y dice:
--tranquila, te lo pasarás genial con nosotros.
Félix resopla. Abajo Juan teniendo sexo con Silvana y arriba Sol y Omar con ganas de sexo. El tímido chico no sabe por dónde meterse. A Silvana le gusta acostarse con Juan pero en esos momentos lo que más quiere es devolvérsela a Omar, que vea que no le preocupa nada lo que él piense. Así que ella misma se monta sobre Juan y cabalga en el sofá, a la vista de los que quieran verlos. Juan está encantado porque más testigos de su gesta no podía tener. Así está seguro que nunca el secreto de su sexualidad verá la luz y menos que alguien le dé algún tipo de credibilidad.

Omar hace pasar a Sol a su cuarto muy galantemente.
--¡ponte cómoda¡
Omar va a pasar con ella pero Félix se queda en la puerta.
--¿quieres tomar algo?
Omar le sonríe:
--¿vas a bajar ahora?
Se oyen los jadeos tanto de Silvana como de Juan, por parte de ambos bastante exagerados. Félix se ruboriza. Sol le guiña el ojo a Félix:
--sabes lo que quiero tomar.
Ella mira a Félix con cara de enferma sexual. Omar abraza por los hombros.
--¡macho, ya la hiciste¡ ¡qué bien la vas a pasar¡
Félix se ruboriza. Omar lo mira con complicidad.
--¡espero que no te importe que yo comparta tu suerte¡
Félix se aparta de Omar y dice:
--¡Yo no pienso hacer nada, si esa quiere sexo tendrá que ser contigo¡
El rechazo de Félix está haciendo enloquecer del deseo a Sol. Omar se lleva las manos a la cabeza, tiene miedo que la chica se vaya y no está dispuesto a quedarse sin echar un polvo esa noche.